martes, 19 de abril de 2011

noche vacía



Recién llego de una salida con amigos de amigas... una noche que sirvió para que volviera corriendo a mi casa. Algunas frases que me revuelven el estomago como "es un zurdo", "porque no me dejan entrar si yo tengo mas plata que ellos", "el celeste no combina con el blanco", "a estos habría que prohibirles la entrada"...y muchas otras que trataba de no escuchar. En un momento, veo a una de mis amigas haciendo señas de silencio y señalándome, como avisando que yo no pensaba así.



Es difícil describir la sensación que me produce ver a un par de chicos -no tan chicos- creer que son mejores que otros porque tienen un auto mas caro o una remera mas linda. Una posición, que en este caso por cierto, tienen por el único hecho de haber nacido donde nacieron y no en otro lado, sin merito alguno.


Me considero una persona sociable, pero no pude cruzar una palabra con ninguno (los que me conocen sabrán que eso en mi es casi imposible).



Creo que cada quien es libre de ser como se le antoje, pero por mas que sé que existe gente así, siempre me vuelven a sorprender.


No trataría de hacerles cambiar ni mucho menos, ni me complico evaluando cual es la forma correcta de pensar, si es que hay una.



No me sentí mejor sino distinta, como de otro planeta.... me dieron una especie de lástima y vergüenza ajena, los vi como tres cuerpos humanos desperdiciados ahí. Gente a la que la vida (o lo que yo considero que es vida) les pasa por al lado y no los toca.



Cuanta mas gente así conozco, mas me gusta mi planeta.